Después de pasar por los remordimientos que pasó por sus acciones pasadas

El Señor le regaló una paz muy profunda, llena de consolaciones

Tuvo varias experiencias místicas

Se enamoró de la persona de Jesús y la Santísima Trinidad

Cuando escuchó el repique de las campanas de una iglesia, se imaginó a la Santísima Trinidad como 3 teclas de un piano, en donde cada una sonaba y se armonizaban perfectamente entre las tres, sintió tanta consolación agradeció a Dios esta experiencia.

En una misa Él descubrió a Jesús en el Santísimo Sacramento, lo llenó tanto de una consolación que derramó sus lágrimas por el amor que sentía por Jesús

En unas de sus oraciones, descubrió la humanidad de Jesús lo invitaba a dar lo mejor de sí, en este nuevo modo de vivir, en esta conversión.