Compartimos con ustedes el Evangelio II Domingo del Tiempo Ordinario.

En aquel tiempo, vio Juan el Bautista a Jesús, que venía hacia él, y exclamó: “Éste es el Cordero de Dios, el que quita el pecado del mundo”. Éste es aquél de quien yo he dicho: ‘El que viene después de mí, tiene precedencia sobre mí, por¬que ya existía antes que yo’. Yo no lo conocía, pero he venido a bautizar con agua, para que Él sea dado a conocer a Israel”.

Entonces Juan dio este testimonio: “Vi al Espíritu descender del cielo en forma de paloma y posarse sobre Él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: ‘Aquél sobre quien veas que baja y se posa el Espíritu Santo, ése es el que ha de bautizar con el Espíritu Santo’. Pues bien, yo lo vi y doy testimonio de que éste es el Hijo de Dios”.

PALABRA DEL SEÑOR.
Todos: Gloria a ti, Señor Jesús