Compartimos con ustedes el comunicado oficial,que ha enviado el miércoles 25 de marzo, Mons. Alfredo José Espinoza, Obispo de Quito a todas las parroquias, con las pautas para las celebraciones propias de Semana Santa, frente a la emergencia sanitaria que vive el mundo entero.

SEMANA SANTA – QUITO

 Domenico Agasso: “Santidad, se acerca una Pascua “a puerta cerrada”, con celebraciones en línea… ¿Cómo hay que vivir esta Pascua en medio de la pandemia?”

 Francisco: “Con penitencia, compasión y esperanza. Y humildad, porque muchas veces se nos olvida que en la vida hay “zonas oscuras”, momentos oscuros.

Este tiempo es oscuro para todos sin exclusión. Está marcado por el dolor y sombras que se nos han metido a la casa. Es una situación diferente de las que hemos vivido incluso porque a nadie puede permitirse estar tranquilo, cada uno comparte estos días difíciles”

El Consejo de Gobierno de la Arquidiócesis de Quito, teniendo presente los dos Decretos de la Sagrada Congregación para el Culto Divino sobre la celebración de la Semana Santa, del 20 y 25 de marzo respectivamente, hemos decidido lo siguiente:

1. Ofrecer un SUBSIDIO para la celebración de la Semana Santa, el mismo que sirva para los sacerdotes como para los fieles.

Será concreto, participativo, sin rúbricas, con indicaciones básicas, interactivo que vaya motivando a los fieles a no ser simples espectadores de una transmisión on line y puedan participar desde sus casas; o en caso de que no se conecten a ninguna transmisión, que les sirva como guía para tener celebraciones familiares propias presididas por el Padre de Familia u otro miembro de la familia. Para la elaboración del subsidio se conformará una pequeña comisión de cuatro sacerdotes que se encargarán de la elaboración del mismo y será luego revisado por el Arzobispo.

2. El criterio general es que todos los sacerdotes celebren en su Parroquia, en el templo parroquial, sin fieles: “… los Obispos y los presbíteros celebren los ritos de la Semana Santa sin la presencia del pueblo y en un lugar adecuado, evitando la concelabración y omitiendo el saludo de paz”.

Hay sacerdotes que están en sus casas o en casa de sus padres. Deberían regresar a sus parroquias, al menos, para estos días. Si no lo pueden hacer, cada uno debe pedir el permiso del Arzobispo para poder celebrar allí donde está, adecuando dignamente el lugar.

3. De ninguna manera es obligatoria la transmisión on line. La celebración de la Semana Santa por parte de los sacerdotes no está ligada a una transmisión on line. Si se la hace, hay que cuidar la CALIDAD de la misma, por eso pensamos que si la calidad de transmisión es buena lo hagan, caso contrario sería mejor que sugieran a sus fieles unirse a la celebración que el Arzobispo hará desde la PUCE. Tengo la autorización para celebrar allí y no en la Catedral pues allí no puedo garantizar la calidad de la transmisión.
4. Al final de los dos documentos se señala claramente de que las procesiones de estos días, a juicio del Obispo, pueden ser trasladadas a otra fecha. Se sugiere el 14 y 15 de septiembre, alrededor de la Fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz. En el caso de una devoción propia de una parroquia, ejemplo “Señor de la Santa Escuela” de Machachi, el párroco pedirá posteriormente el permiso respectivo al Arzobispo para trasladar la celebración a una fecha adecuada.
5. Se gestionará un permiso especial, con el carnet de sacerdote, para que puedan movilizarse a la parroquia o a un Monasterio, en los días del Triduo Pascual. Esto en caso de que siga vigente el presente horario del toque de queda.

Ahora veamos en concreto cada día de la Semana Santa:

• DOMINGO DE RAMOS:
• Se celebre sin pueblo.
• La celebración se haga en el interior de la iglesia parroquial.
• Se usará la tercera forma prevista por el Misal Romano.
• Se pide motivar a los fieles que hagan un pequeño ramo con hojas de plantas que tienen en la casa y con flores. En caso de seguir la transmisión on line, se les puede pedir que agiten los ramos el momento en que el sacerdote imparta la bendición de acuerdo a la forma prevista.
• LUNES, MARTES Y MIÉRCOLES SANTO:
• En el subsidio se presentará un esquema para que los fieles puedan hacer celebraciones de la Palabra en sus casas.
• Cada párroco motivará a sus fieles previamente para que vivan como “iglesia doméstica” este momento celebrativo.
• RESEÑA:
• Está suspendida por este año.
• MISA CRISMAL:
• Como Arquidiócesis hemos decidido TRASLADARLA A OTRA FECHA.
• Se puede seguir usando, en caso que lo necesiten, el crisma y óleo que se tiene en cada parroquia.
• Cuando se celebre la Misa Crismal, habrá luego un compartir fraterno, lleno de alegría, y como dice el salmista, “la boca se nos llenará de risas, la lengua de cantares”. “Volveremos a brindar” como lo hemos cantado estos días.
• JUEVES SANTO (CENA DEL SEÑOR):
• “Se concede en este día, excepcionalmente a los presbíteros la facultad de celebrar la Misa, sin la presencia del pueblo, en lugar adecuado”.
• Se omite el lavatorio de los pies.
• Al final de la Misa en la Cena del Señor, se omite también la procesión.
• El Santísimo Sacramento se reservará en el Sagrario.
• VIERNES SANTO:
• Se lea la Pasión y ver la posibilidad de que haya dos lectores más.
• Se indicará en el subsidio que el párroco motive a que en cada casa se prepare una pequeña mesa con un mantel y en la misma esté un crucifijo.
• El sacerdote haga la bendición al pueblo con la Cruz, al final de la celebración y la bese solamente él.
• En la casa, el padre o la madre de familia, con todas las medidas de higiene, haga besar la cruz a los miembros de su familia.

NOTA: Respecto al “VIA CRUCIS” y a las “SIETE PALABRAS”, se ha sugerido que en el folleto esté una pequeña guía para que en la casa se pueda hacer esta celebración, que no es litúrgica sino devocional.

• VIGILIA PASCUAL:

• Se celebre en las iglesias parroquiales. Si alguien no puede hacerlo en ese lugar, pida el respectivo permiso al Arzobispo.
• Se omite el fuego, se enciende el cirio, directamente, omitida la procesión, se hace el Pregón Pascual.

Se sugiere motivar a que en las casas tengan las velas o cirios. El Padre de Familia, siguiendo la oración del sacerdote, invoque la bendición de Dios sobre el fuego nuevo representado en una vela encendida y luego comparta la luz con todos los miembros de su familia.

Se sigue luego con la Liturgia de la Palabra. Sugerimos dos lecturas del AT: Éxodo y Ezequiel, la lectura del NT y el Evangelio.

Para el canto del Gloria, se pide motivar para que en las casas tengan lista una campana pequeña o sonidos de campanas en el celular para que en este momento se toque.

• Solo se renuevan las promesas bautismales. Su sugiere se motive a que en las casas tengan agua en recipientes apropiados y que el Padre de Familia, en nombre de la Iglesia, siguiendo la oración del sacerdote, invoque la bendición sobre la misma, en el momento oportuno durante la celebración.

“¿Cuál es la fiesta más importante de nuestra fe, Navidad o Pascua? Pascua porque es la fiesta de nuestra salvación, la fiesta del amor de Dios por nosotros, la fiesta, la celebración de su muerte y resurrección…

Estos tres días vuelven a proponer al pueblo cristiano los grandes eventos de salvación operados por Cristo, y así lo proyectan en el horizonte de su destino futuro y lo fortalecen en su compromiso de testimonio en la historia” (Francisco).

+ Alfredo José Espinoza Mateus, sdb

Arzobispo de Quito y Primado del Ecuador

Quito, 25 de marzo de 2020